Entrenamientos a deshoras

Llevo un par de semanas complicadas, no consigo organizarme como me gustaría y no puedo entrenar a gusto. Esto seguro que repercute en las competiciones, pero como ahora mismo no tengo nada en la cabeza, qué más da... iba con ganas de revalidar la victoria del año pasado en Campello pero ya he visto inscrito a Micó, y eso son palabras mayores, para mí es imbatible. Por poner una comparativa, para que nadie piense que doy las batallas por perdidas antes de iniciarlas, es como si corriese un  10.000 y mi rival fuera alguien con MMP de 36:00. Poco o nada tendría que hacer contra mí. Pues bien, es lo que hay.

Mientras tanto, he empezado a alternar la bici y correr, por aquello de refrescar las piernas. Y vaya si se sufre, lo mejor es no dejar ninguno de los dos deportes del todo, porque volver a subirse a la bici ha sido bastante traumático, que se lo pregunten a mi culete...Lo que sí se agradece es el cambio de temperatura, para correr ya empieza a hacer demasiado calor, 21-23º hacen que sudes de lo lindo, mientras que en la bici llegas a tener hasta un poquito de frio. Si ya lo decían, las bicicletas son para el verano...

Este  domingo hay una bonita carrera en la Serra Grossa. Ayer fui rodando desde casa a Jesuitas y empecé a hacer algo del circuito. Obviamente me perdí,  cosa con la que contaba. Lo volveré a probar. La impresión que me llevé es que el circuito es peligrosísimo, así que hay dos opciones, o ir a por todas y sacrificar los tobillos o tomárselo con calma y disfrutar, cosa que no suelo saber hacer. Decir, para todo aquel alicantino que nunca haya subido, que es sin duda uno de los enclaves que uno no debería perderse de esta ciudad. Os lo recomiendo al 100%, unas vistas panorámicas preciosas e inigualables.

Ya os contaré cómo queda mi decisión.